Qué hay que saber para contratar un abogado

A veces es fácil saber si se necesita contratar un abogado. Si hay una acusación penal, alguna notificación de juicio o un proceso de divorcio, un abogado es exactamente lo que se necesita. Pero los abogados no solo prestan servicio a los acusados de crímenes o las personas que son citadas en la corte.

¿Cómo tener claro cuál es la decisión más acertada cuando hay tantos abogados? La elección del abogado equivocado puede ser devastadora, así que antes de llegar al acuerdo final con un abogado, se debe investigar tanto como sea posible. Aquí se mencionan algunos aspectos para tomar la decisión más sensata.

¿Por qué contratar un abogado?

Los abogados cualificados, también pueden dar consejos y conocimientos a las personas que sólo necesitan hablar con un experto.

El asesoramiento de un profesional del derecho cualificado ayuda a comprender las complejas reglas que se aplican en las negociaciones comerciales y en la celebración de contratos de asociación, planificación inmobiliaria, adopción, redacción de testamentos y fideicomisos, estrategia fiscal y mucho más.

Al contratar un abogado adecuado, la calidad de vida del cliente se mejora, protegiéndolo de situaciones que posteriormente pueden causarles problemas emocionales y financieros.

Un abogado de buena calidad ayuda a los que están en problemas hoy, y a los que quieren evitar problemas en el futuro.

Antes de buscar un abogado, ¿puede resolver usted mismo el problema?

En muchos casos, se puede resolver el problema sin la ayuda de un abogado. Si una empresa ha hecho algo malo, se puede acudir al departamento de atención al cliente. A menudo una queja se puede resolver sin la ayuda de un abogado.

También se puede contactar con el departamento de protección al consumidor a servicio de la fiscalía.

Si hay afectación por un sector regulado (como un banco o una compañía de seguros), hay un organismo gubernamental que supervisa este sector y que puede ser contactado.

Los grupos comunitarios también pueden proporcionar asesoramiento gratuito sobre estas cuestiones jurídicas.

Por otra parte, el asesoramiento jurídico puede ser útil en ciertas ocasiones. Un abogado puede ayudar a contactar primero con las personas adecuadas y luego no hacer nada más sobre el caso.

Tomar en consideración los siguientes 8 aspectos, permitirá contratar un abogado adecuado.

1- Saber lo que se está buscando

Casi todos los abogados tienen su propia especialidad. Un abogado con muchos años de experiencia en inmigración no es la persona adecuada para un caso de índole penal.

Es primordial asegurarse de que se contrató al abogado que entiende el caso y tiene experiencia en el ámbito jurídico con el que está tratando.

2- Determinar la urgencia de la situación.

Si hay acusación de cometer un delito o acusación ante un tribunal, es importante contactar a un abogado. Evitar las demoras en la búsqueda de asistencia jurídica, le permitirá hacer valer sus derechos.

Esperar varios meses puede poner en peligro el derecho a la asistencia jurídica. Aunque se piense en la asistencia jurídica para evitar problemas en el futuro, nunca es demasiado pronto para solicitarla.

Por ejemplo, no se debe posponer demasiado tiempo las estrategias fiscales, el asesoramiento en materia de derecho corporativo y laboral o la planificación inmobiliaria. Posponer las cuestiones legales puede costarle más.

3- Encontrar el abogado que sea mejor para el caso

Hay muchos abogados, pero ¿cómo encontrar el adecuado para el caso? Primero se tiene que encontrar a alguien que trabaje en la jurisdicción correcta. Por lo general, los abogados tienen licencia en un determinado estado.

A continuación, hay que encontrar a alguien que sepa cómo manejar mejor el caso. Muchos abogados se especializan en una u otra forma de derecho. Un especialista en derecho de familia no será la mejor opción si se necesita un abogado para casos de bancarrota.

Cuando la persona se asesora en el sitio adecuado, se adaptará el caso a los abogados basándose en sus conocimientos y experiencia para que se pueda encontrar fácilmente un especialista o un abogado general, cuando se necesite asesoramiento jurídico.

En tercer lugar, y tan relevante como los anteriores, es encontrar un abogado que se ajuste al presupuesto que se tiene. Si un abogado anuncia en la televisión por una pequeña cuota, todos los servicios que necesita pueden no estar incluidos en esta cuota.

Es importante aclarar lo que se incluye en la tarifa anunciada. Esto permite hacer comparaciones de cuánto cobran los abogados y qué servicios prestan realmente.

4- Conseguir referencias

Como cuando se va a contratar a un contratista o a una niñera, es mejor obtener el consejo de un amigo de confianza.

No se contrataría a una niñera a través de anuncios de televisión, ni se contrataría a un abogado a través de un abogado corporativo. Si ninguno de los amigos o parientes tiene recomendaciones, hay muchos lugares en Internet como web y blogs, que pueden ayudar a mejorar búsqueda.

5- Realizar averiguaciones

Antes de empezar a buscar abogados, se recomienda averiguar sobre el problema legal. Si se aprende la jerga, se entiende el tema y se descubre la responsabilidad como cliente, se ahorra tiempo y dinero.

Si se continúa con este estudio, también se podrá entender más fácilmente al abogado. La lectura de otros artículos de referencia en diferentes sitios web para comenzar a resolver el problema legal particular, también puede resultar útil.

Si se trata de un problema simple, como la redacción de un testamento, incluso se puede hacer la mayor parte del trabajo. Si se ocupa del papeleo o se tiene idea de que exactamente hacer, todos los involucrados ahorrarán tiempo, energía y dinero.

6- Prestar mucha atención

Elegir un abogado es una decisión increíblemente importante, y la decisión correcta puede marcar la diferencia. Muchos abogados ofrecen asesoramiento gratuito, tanto en persona como por teléfono.

Es importante encontrar a alguien que tenga las habilidades que se necesitan, que sea honesto y que trabaje duro para resolver el caso.

Pueden dar una estimación de cuánto tiempo y dinero gastarán en el problema legal y cuánto costará.

Importante no tener miedo de pedir más de una opinión. Esto ayudará a comprender mejor el problema y su complejidad, para tomar la decisión correcta sobre quién es el que mejor se ajusta a lo requerido.

7- Averiguar cuánto cuesta y cómo esperan que le paguen

Una vez que se haya elegido un abogado, hay que asegurarse de entender cómo cobran por sus servicios. Los cuatro tipos más comunes de honorarios son los honorarios por hora, los honorarios inesperados, los honorarios de suma global o los honorarios anticipados.

Si bien los casos sencillos que no requieren litigio suelen basarse en una tarifa fija, cada abogado y cada problema jurídico son diferentes. Es fundamental entender cómo se pagará los honorarios al abogado y obtener su consentimiento por escrito.

8- Lea el anuncio con atención.

En general, si se escucha demasiado bonito para que sea cierto, entonces probablemente lo sea. Muchos abogados de renombre no se anuncian en los periódicos, en las Páginas Amarillas o en blogs o sitios web atractivos.

No siempre el tamaño del anuncio de las Páginas Amarillas o la publicidad en un sitio web, significa que un abogado está más cualificado que un abogado con un anuncio clasificado (o sin ningún anuncio). Siempre comprobar los antecedentes del abogado.

Como se acaba de señalar, hay diferentes aspectos a saber al momento de contratar los servicios de un abogado. Por lo general, la experiencia del profesional del derecho es de vital importancia para que el caso concluya en los mejores términos.

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